Nombre: Alcazaba de Mérida
Lugar: Mérida
Época: s. IX
Materiales: granito
Propiedad: municipal
Estado: ruina conservada
Visitable: sí
Descripción:
La alcazaba árabe de Mérida está situada junto al río Guadiana en la ciudad pacense del mismo nombre. Estamos ante la edificación defensiva más antigua existente en la península Ibérica según atestigua una sobre el arco de herradura del alcarazejo en la que se viene a decir que fue construida por Abderramán II en el año 835 d.C. para controlar las rebeliones que se habían producido en la zona unos años antes. Si bien como estamos en Mérida, dentro de la alcazaba se han encontrado numerosos restos de construcciones romanas, entre ellos parte de la muralla del s. I a. C.
Se trataba de una fortificación de planta cuadrada rodeada de muros con unos 10 m. de altura y poco menos de 3 m. de anchura. Para su construcción los musulmanes reutilizaron sillares romanos y visigodos. Contaba con torres esquineras de planta cuadrada además de otras 25 situadas a lo largo de los lienzos de muralla o bien protegiendo las puertas de acceso. Antes de entrar en la alcazaba propiamente dicha, había que atravesar el alcazarejo, una especie de torre barbacana (exenta a la muralla) que contaba con dos torres defensivas unidas por un arco de herradura (donde podemos leer la fecha de edificación). En el interior encontramos un aljibe al que se puede acceder a través de una escalera doble bajo una de las torres y que es el único resto musulmán que pervive en el interior. En el exterior tenía un foso que rodeaba todos sus lados excepto el del río.
En el año 1230 Mérida cae en manos de la Orden de Santiago. Estos realizan obras de mejora y construyen su Casa de la Encomienda. Las torres albarranas que encontramos son de origen cristiano.
A mediados del s. XVI se realizan nuevas de obras y se instala Convento de la Orden de Santiago con su iglesia y el claustro, actual sede de la Junta de Extremadura. También se debe la Orden de Santiago la Torre de la Pólvora. Junto a ella se construye en el s. XIX el cenador y un pórtico neogótico, aunque se reaprovechan columnas de origen visigodo.
En la actualidad se continúan con los trabajos arqueológicos. También se realizan congresos y exposiciones y hay un museo de Geología.
Mérida contaba con un recinto amurallado de origen romano desde el s. I a. C. Entre los siglos II y IV d. C. la muralla es ampliada. En el s. V los visigodos la refuerzan con granito pasando a tener un grosor de unos 5 m. Esta muralla fue reutilizada por los musulmanes para construir la alcazaba aunque aún podemos ver algún resto junto a la Puerta del Puente.
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